Poetas neohelénicos, generación de poetas griegos de los años 30 que incorporó movimientos como el simbolismo y el surrealismo a temas que evocaban cantos amorosos o lúdicos de la antigua Grecia o bien composiciones de tema patriótico, inspirados por el abatimiento sufrido cuando los turcos les arrebataron la antigua ciudad griega de Esmirna en 1922 y masacraron a sus habitantes griegos. Odiseas Elytis es el más conocido, pero este grupo de poetas alcanzaron todos ellos una gran hondura lírica.
EN EL BANQUETE
Un dios extraño se sentó en el banquete, Eros, el no invitado. No lo vieron los esclavos ni los comensales. Sólo tú.Quiso probar dos vasos, los nuestros; y se volvió ambrosía el vino y las amapolas yedra de Dióniso. Nuestros ojos brillaron más hondamente y tembló nuestra voz; afuera la noche nos invitaba, venerable, a la protección de su silencio.
Esta noche, la Noche mantuvo más lentas a las Pléyades y a la luna Pasifae (Alexandros Matsas) -Ciclamen, ciclamen, en la grieta de la roca, ¿Dónde encontraste colores para florecer?, ¿Dónde tallos para moverte? -Reuní la sangre gota a gota sobre las piedras, trencé un pañuelo y ahora recojo el sol. (Yannis Ritsos – Cantos dísticos de la patria amarga) .
LA PASION (fragmento)
Me dieron la lengua griega la casa pobre en las playas de Homerto. Mi lengua, mi única preocupación en las playas de Homero. Allí sargos y percas verbos azotados por el viento verdes corrientes en el azul cuanto vi encenderse en mis entrañas, esponjas, medusas con las primeras palabras de las Sirenas. Allí granadas, membrillos dioses morenos, tíos y primos vaciando el aceite en enormes tinajas y brisas del barranco exhalando perfumes de mimbre y de lentisco de esparto y de jengibre con los primeros trinos de los pinzones .. (Odisseas Elytis) EN LOS LÍMITES DE LA CIUDADCLAVIJA El camino hacia el amor está sembrado de ojos de gatos en la sombra y en el silencio que se extiende alrededor como red de alegríael camino hacia el amor es nocturno
viene de arriba y llega a donde el azul del cobalto e incluso el amarillo -del cadmio- no son ya los colores con los que tiño mis pinturas sino finas músicas del arpa del veneno y de los sistros de la huída
de los sistros de la huída del silencio de la tierra (Nikos Engonopulos)