Si tuviese que elegir una definición del Barrio de Salamanca diría que «es un barrio que se ama a sí mismo», cosa bien rara en Madrid, donde se dejan sumidos en el abandono lugares y rincones evocadores y llenos de historia.
Este Barrio mima sus calles, de casas señoriales pobladas de tiendas, muchas de ellas pequeñas y recoletas pero exquisitas y acicaladas como damiselas.
Uno de estos enclaves es «Europa-Europa», situada en la calle D. Ramón de la Cruz nº 48, que exhibe preciosa bisutería antigua, encajes, sedas y prendas de telas sutiles procedentes del siglo XIX y principios del XX. Y todo ello en una atmósfera de sosiego, entre tonos suaves y divanes donde reposan descuidadamente echarpes de colores delicados.
El paseante curioso que deambula por esa calle ve sus ojos atraídos hacia este discreto escaparate donde descubre pendientes con pequeñas perlas opalescentes, encantadores colgantes con diseños de otras épocas, blondas …
Tienda NADA RECOMENDABLE, con una atención al cliente deplorable.
Soy una futura novia que acudí a esta tienda buscando velos y detalles de tul bordado para mi vestido. Fui con toda mi ilusión a esta tienda para ver que cosas tenían y cual fue mi sorpresa cuando la persona que me atendió practicamente me echó de la tienda.
Desde que entré, la persona que estaba en el interior, entiendo que era la dueña, no sólo me estuvo persiguiendo por toda la tienda mientras miraba las cosas que tenían, sino que también se dedicó a soltarme todo tipo de impertinencias y comentarios peyorativos sobre las novias que se acercaban a su tienda, hasta que consiguió que coguiese la puerta y me fuese.
No entiendo como este tipo de personas pueden estar al frente de un negocio de cara al público, y permitirse el lujo de ser unas auténticas maleducadas cuando encima estas dispuesto a comprar algo.
Me encantaría que si alguien más a tenido una mala experiencia con este negocio lo publique, ya que es la única arma que tenemos contra este tipo de gente que es capaz de destrozar las ilusiones de la gente, y que no se merece tener una tienda abierta con un trato al cliente tan deleznable.