«El tiempo deja caer pequeñas pulgadas detrás de él siega las finas moléculas en las praderas de agua domina las bolsas de aire atraviesa su jungla corta el gusano de la ola y de cada mitad nace llena de luz una mariposa en el volcán se hilvana a lo largo de una nota de violín riza el corte errante del vidrio en las finas horas de transparencia allí donde nuestros sueños revuelven el cantarino manjar de luz
el río que la montaña enfila hacia el oriente articulado de peligros y de porqués y carga de medallas y de holocaustos a todo lo largo de las gardenias se ha crispado alrededor de tu puño camino abotonado de mojones al sol vecinos a los campos más allá de las riberas el arco agranda la sonrisa del espacio hasta el rictus del glaciar y la lanzadera del tejedor punteado de ramas en la borrachera del ciempiés atraviesa los obstáculos calvos y los ojos pelados de las flechas que veían sin embargo la soldadura al borde del lago se deshace como bocanadas de nubes se instalan sobre el agua los sentimientos ordenados de las canastillas bordadas con plumas estilográficas o el trémolo de fuego que se mueve por el espacio que el eco ha vaciado el viento huye de la puerta giratoria el viento examina los paisajes los pasajeros y la voluntad de ser uno mismo modifica en el hueco del chapoteo su continuo arriendo
las amapolas eléctricas bajo la concha de tortuga arropan los granos de arena y de belleza el crepúsculo eleva los adioses al horizonte bañado con la fria claridad del estetoscopio azotado por los resplandores navales da la vuelta a la prisión y sus caidas de sitio en sitio preparan la electrificación de los ojos adán y eva se esconden en el bello lugar del fruto hendido dos vueltas hacen bajar del cielo subterráneamente a gemelos de otras épocas con el sabor de los metales pesados los cristales de las estrellas ofrecen el regazo en la entrada de la cueva en el roquedo petrificado en alto para usted cayendo en el dejar-ir del invierno que esgrime sus sables ..»
Tristán Tzara (Rumanía 1896-1963). En El hombre aproximativo, obra a la que pertenece este poema, el autor entremezcla, opone, despliega metáforas, interrelaciona palabras, juega con las imágenes y el significado, llevándonos hacia caminos desconocidos. Escrito en el año 1931, es un luminoso símbolo de las vanguardias de aquella época.
He disfrutado mucho cada poema leído de Triztán Tzara, pero este en especial mezcla de manera muy peculiar los estados de ánimo frágiles y evanescentes de las personas.
ta chido el poema
OYE AMIG@ ESTA BONITO EL POEMA PERO COMO SE LLAMA PORFAVOR ME URGE
Lo siento no recuerdo el nombre del poema pero el libro dónde se publicó se llama EL HOMBRE APROXIMATIVO.
Un saludo
Necesito Un Poema De El…
Pero Mas Corto Para Una Presentación!
Lo Necesito URGENTEMENTE!
Siento no poder ayudarte, ya no tengo el libro (hace bastante tiempo que puse esta reseña). De todas formas creo que en muchas bibliotecas públicas lo tienen. Un saludo