Izzy (Harvey Keitel) es un famoso saxofonista. Accidentalmente recibe un disparo que lo sumerje en coma. Mientras es llevado hacia un hospital, por su mente van desgranándose escenas y recuerdos de su vida. ¿Pero de su vida o de la vida que desearía haber vivido? El tiempo aquí se comprime y se expande, aún hay márgen para vivir un amor profundo, pronunciar esas frases que debería haber dicho, realizar esas acciones, esos actos que quedaron pendientes y que hubiesen proporcionado plenitud a su existencia …
Lo real y lo incierto se funden, se encadenan y finalmente aparecen como un todo, dando sentido a la historia.
Maravillosas interpretaciones de Harvey Keitel y Mira Sorvino, que fueron dirigidos por el autor del libro, Paul Auster, un lujo que pocas veces se ofrece en el cine.
Uno de esos films que permiten diferentes interpretaciones, que seduce e incita al espectador a la complicidad.